En obra: club de lectura

En obra: club de lectura

Poeta chileno, de Alejandro Zambra (Anagrama, 2020)
Coordina Julia Coria y participa el autor
Gratuito con cupo limitado INSCRIPCIÓN CERRADA

El club de lectura En obra forma parte del espacio de narrativa del CCEBA orientado a adolescentes.
Los últimos martes de cada vez nos encontramos para comentar cuentos o novelas y también conversar con sus autores sobre sus procesos de creación y otros temas en torno al oficio de la escritura. Inicialmente este club estaba dedicado a chicas y chicos en etapa de formación, pero con el tiempo lo abrimos a todas las personas interesadas, con la idea de que entre todos podamos formar, ampliar y compartir nuestra experiencia lectora.

Gonzalo es poeta, forma familia con Carla y se convierte en padrastro de Vicente, un niño adicto a la comida para gatos que luego crece y quiere ser poeta también, a pesar de los consejos de su madre, y de León, su padre mediocre y ausente. Esta sería la sinopsis de Poeta chileno. Sin embargo, a lo largo de sus cuatrocientas páginas hay mucho más: asuntos como la relación entre la literatura y la familia, entre la masculinidad, la paternidad y la padrastría, la importancia de las palabras, el mito de la poesía chilena, la felicidad y un narrador que “siempre aguarda de fondo, muy alerta, la voz del narrador de narradores, que de pronto irrumpe y nos distancia de lo recién relatado, como quien rompe la cuarta pared, para decirnos cuidadito, descrea de las certezas, no se fíe de las voces imparciales“,
como anota Alejandra Costamagna (revistadelauniversidad.mx, junio 2020).

Alejandro Zambra (Santiago de Chile, 1975) es poeta, narrador, profesor y autor también de Bonsái (2006), La vida privada de los árboles (2007), Formas de volver a casa (2011) y Facsímil (2014).

“(Poeta chileno) Es una novela sobre Chile que escribí en México y también una novela sobre la padrastría que escribí mientras me estrenaba como padre biológico. La escribí durante los dos primeros años de vida de mi hijo. Creo que esa felicidad se nota en el libro, de algún modo, aunque es un libro tristísimo, también. En fin. Primero fui un escritor de domingo, después un escritor muy nocturno, y esta novela, en cambio, la escribí por las mañanas, en un cuartito de dos por dos, sin internet, que hay en la azotea. En algún momento empecé a llamar a ese cuartito Chile, así que técnicamente podría decir que escribí la novela en Chile.” A. Zambra, Télam, 2020.